1. Alimentación: Reciben energía de la red eléctrica y la distribuyen al motor.

2. Control: Usan contactores y relevadores para encender y apagar el motor.

3. Protección: Incorporan dispositivos como guardamotores, fusibles o disyuntores que evitan daños por sobrecorriente, cortocircuitos o sobrecargas térmicas.

4. Arranque: Dependiendo del tipo de arranque (directo, estrella-triángulo, suave, entre otros), regulan la corriente y el voltaje para mejorar el rendimiento del motor.

5. Monitoreo: Algunos tableros incluyen indicadores o sistemas electrónicos para supervisar el estado del motor y su consumo energético.